Una pena:
Aunque por otra parte, a lo mejor sería una solución. Que todas las marcas se adapten y creen nombres para los eléctricos, con contabilidad y sede diferenciada, y otro paa térmicos. Así, cuando se acaben de enterar que los eléctricos no venden, solo caerá la mitad.
Adiós para siempre a Land Rover: la marca desaparece y sus míticos todoterrenos se venderán bajo tres nombres distintos
El rebranding es algo habitual en las empresas, sirve de ejemplo Cepsa que tras 90 años de existencia ha cambiado de nombre. También lo ha acaba de hacer Land...
www.motorpasion.com